Chau al diésel y al gas: los fabricantes de camiones apuestan por el transporte 100% eléctrico desde 2040
La transición hacia la electrificación total del transporte se acelera: si bien al principio se preveía el fin del diésel y del gas para 2050, los principales fabricantes de camiones se comprometieron a alcanzar esa meta mucho antes y adelantaron ese plazo para 2040 en Europa.
Así lo anticipó el reconocido diario Financial Times, que reveló que Daimler, DAF, Iveco, Ford, MAN, Scania y Volvo firmaron un acuerdo en el que se comprometen a discontinuar las motorizaciones convencionales de su portfolio en 20 años. El primer paso ya lo están dando: las versiones eléctricas son cada vez más comunes en su gama y cada vez más marcas las ofrecen, pero por el momento sólo orientadas a aplicaciones urbanas. La escasa autonomía que le proporcionan las baterías y una red de infraestructura de carga aún en vías de desarrollo son el talón de Aquiles de este tipo de propulsión, por lo que el gran desafío a cumplir será poder hacer factible su uso en recorridos de media y larga distancia o en máximas condiciones de exigencia como es el caso del rubro de la minería o la construcción.
Si bien aún quedan varios años por delante y el avance de la tecnología y el desarrollo de las baterías es muy rápido, a la vez que las estaciones de carga van multiplicándose en el Viejo Continente, también existen otras alternativas que están siendo investigadas por los fabricantes, como los camiones eléctricos a pila de combustible de hidrógeno o combustibles sintéticos.
En cuanto a los camiones FCEV (a pila de hidrógeno), la compañía que más avanzado tiene su desarrollo es Hyundai, que ya comenzó a realizar pruebas en condiciones reales con sus XCIENT Fuel Cell y que ya se comercializan de manera oficial. Por su parte, desde hace varios meses atrás, Daimler y Volvo anunciaron un acuerdo en Investigación y Desarrollo para este tipo de vehículos así como la fabricación de baterías, mientras que el Grupo Traton (integrado por MAN, Scania, Volkswagen y Navistar) también tienen su propio acuerdo con Hino, en este caso apuntando hacia la electrificación. Eso sí, esta transición no será nada económica y precisamente por ello no paran de tejerse alianzas entre fabricantes: de acuerdo al Director Ejecutivo de Scania, Henrik Henrinksson, habrá que invertir entre 50.000 y 100.000 millones de euros para cumplir con este nuevo plazo.
Por el momento este hito que sin dudas marcará un antes y un después en la historia del transporte está previsto para Europa, donde las distancias son más cortas y la infraestructura es mayor. En nuestra región un cambio de este tipo sí llevará muchos más años. Eso sí, aquí también se están dando los primeros pasos con la llegada de los primeros camiones eléctricos y los impulsados a GNC/GNL.