Empresas: Scania entregó dos nuevos buses K250 UB a la Línea 17

Scania sigue sumando presencia en el segmento de los buses urbanos. En esta oportunidad y a través del concesionario oficial Baisur Motor, la marca sueca entregó dos ómnibus a la Línea 17 que ya están prestando servicio en su tradicional recorrido que une Wilde, en el sur del conurbano, con el barrio porteño de Recoleta, atravesando el Metrobús 9 de Julio hasta la emblemática Facultad de Derecho.

En este caso se trata de dos unidades carrozadas por TodoBus que cuentan con el chasis Scania K250 UB 4×2 de piso bajo y motor trasero. La elección de la firma escandinava se dio luego de comprobar los buenos resultados obtenidos con sus productos: “Las unidades Scania están respondiendo muy bien en el servicio”, destacó Leonardo Pereira, director gerente de la Línea 17, que actualmente posee una flota de 73 unidades y que posiblemente se sigan sumando más modelos del Griffin.

Por su parte, Miguel Ángel Ortiz, chofer de la línea 17 que hace 32 años trabaja en la empresa, valoró la respuesta y el confort de marcha del chasis Scania: “Con respecto a la otra unidad que conducía se ve diferencia en el torque, la suspensión y más reacción. El confort de marcha respecto de otras marcas que conduje es muy superior. Cero vibraciones y los pasajeros notan la diferencia”.

Con gran experiencia en el segmento de media y larga distancia, el ingreso en la categoría de buses urbanos representa un gran desafío para la marca y para ello diseñó una estrategia de servicio pensada para este tipo de uso: “Las unidades adquiridas por la Línea 17 tienen un motor de 250 caballos, un tradicional propulsor de Scania robusto y eficiente, muy probado ya en buses interurbanos. Su característica es un torque muy elevado a bajas vueltas, lo que permite un ahorro de combustible, además de un sistema innovador de frenado que, en comparación con otras marcas, es muy apreciado”, explicó Matías Gandulfo, asesor comercial de buses de Baisur Motor.

En este caso, la marca brinda un servicio de mantenimiento flexible, que se adapta a cada tipo de operación y no está enfocado en la cantidad de kilómetros realizados, sino en la cantidad de horas de trabajo. A diferencia del mantenimiento de larga y media distancia, con los buses urbanos se realizan las tareas en horario nocturno, ya que las unidades no pueden parar.