Volkswagen e-Delivery: primer contacto en Argentina con el camión eléctrico que promete revolucionar el transporte en la región
Volkswagen está dando los primeros pasos hacia la electrificación en el transporte en América Latina. Creado íntegramente por la división de Camiones y Buses en Brasil –un motivo de orgullo para el equipo de Investigación y Desarrollo e ingenieros de la compañía-, el e-Delivery es el primer camión eléctrico de la marca, presentado antes incluso que sus pares de Scania o MAN que forman parte del Grupo Traton.
Tras su avant premiere en Argentina, llevada a cabo a fines del año pasado cuando tuvimos la posibilidad de conocerlo técnicamente, la filial local organizó un nuevo evento en el predio de FADEEAC en Escobar donde pudimos manejarlo. La presentación se dividió en tres etapas, una explicación técnica muy detallada y fácil de entender a cargo de Martín Simonpietri, Jefe de Producto de VW Camiones y Buses Argentina; una explicación de cómo puede realizarse su recarga, los tipos de cargadores disponibles y cuál sería la mejor solución aplicable en nuestro país a cargo del equipo de Siemens Argentina y finalmente el contacto en la pista.
Características generales:
El e-Delivery se fabrica en la histórica planta de Resende, pero con una particularidad: mientras que la cabina y otros componentes en común con el resto de la gama comparten la línea de producción, la segunda etapa se lleva a cabo en otras instalaciones ubicadas en el mismo precio como parte del e-Consorcio, en el que Volkswagen trabaja en conjunto con sus principales proveedores: Siemens produce los cargadores y se encargará del desarrollo de la infraestructura; CATL y Moura están a cargo de la producción de las baterías y su mantenimiento; mientras que Bosch, WEG y Semcon suministran piezas y componentes específicos para este modelo. Asimismo, todas las empresas también colaboran en el mantenimiento de los puestos de recarga y en el proceso de reciclaje o descarte de las baterías.
En esta primera etapa, se comercializa en dos versiones, de 11 y 14 toneladas. La variante 11 toneladas 4×2 está impulsada con un motor que entrega 300 kW (408 CV) con un torque máximo de 2.150 Nm desde rotación cero. Cuenta con suspensión neumática de serie y dispone de tres módulos de batería. Opcionalmente, se ofrece también con seis módulos, según la autonomía requerida para la operación. Tiene un peso bruto total de 10.700 kg y su capacidad máxima de carga útil, sumada a la carrocería, alcanza los 6.320 kg.
Por su parte, la versión de 14 toneladas 6×2 está calibrada para uso severo, su motor también entrega 300 kW y torque de 2.150 Nm desde las primeras revoluciones. Su suspensión neumática permite suspender uno de los ejes para generar aún más economía en la operación. También es muy versátil en sus aplicaciones y puede recibir seis o tres módulos de batería según las necesidades del cliente. Tiene un peso bruto total de 14.300 kg y su capacidad máxima de carga útil, sumada a la carrocería, alcanza los 9.055 kg, la mayor en su categoría.
En cuanto a su recarga, aquí entra en juego Siemens, proveedor oficial de la compañía, que presentó un cargador trifásico de corriente continua (CC) de 160 kW, con dos conectores, lo que posibilita reabastecer a dos vehículos en simultáneo. Su capacidad permite recuperar un 80% de la carga en 45 minutos y se ofrecerán diversas alternativas de acuerdo a la configuración de la unidad y a los requerimientos del transportista.
Al volante:
A primera vista, el e-Delivery es prácticamente idéntico al resto de las versiones del camión liviano de Volkswagen, la cabina es exactamente la misma, por lo que visualmente, salvo las protecciones laterales y las insignias, no hay otra cosa que revele que estamos ante la variante eléctrica, siempre hablando de su estética. Las diferencias empiezan a percibirse con los otros sentidos: al acercarnos a la pista de pruebas, lo primero que llama la atención es el silencio de marcha, sólo se escucha un leve zumbido y el funcionamiento del electroventilador que se encarga de la refrigeración de la cabina (aire acondicionado) y del agua, uno de los pocos elementos de control que hay que revisar en su mantenimiento, refrigerante y líquido hidráulico, no requiere cambio de aceite, grasa u otros filtros más que el de habitáculo.
Al subir a la cabina, también encontramos casi todos los comandos de las otras versiones del Delivery, con excepción del instrumental –con dos indicadores analógicos, uno para el velocímetro y otro que combina el tacómetro con información del nivel de carga de la batería y la potencia utilizada, además del display de la computadora de a bordo que junto con la información habitual como el kilometraje, la presión de aire o la autonomía, agrega el nivel de frenado regenerativo seleccionado- y la perilla giratoria que funciona como selectora de marchas, similar al comando de luces típico de Volkswagen, pero que en este caso permite pasar de Drive a Neutro o a Reversa.
Ahora sí, momento de iniciar la marcha: como en un camión con caja automatizada, no sale hacia delante solo sino hasta pisar el acelerador, pero cuidado, la respuesta del acelerador es muy diferente a la de cualquier otro vehículo pesado: al contar con el máximo torque de manera instantánea, la respuesta es inmediata y el e-Delivery tiene la misma reacción que si estuviésemos manejando un auto. Esa es la sensación que más queda latente durante el manejo, la suavidad y la reacción hacen olvidar por un momento que estamos al volante de un vehículo pesado. No hay vibraciones, reacciones bruscas y el silencio es total, sólo se percibe muy levemente el zumbido al que hacíamos mención. Su maniobrabilidad es igual al del resto de la gama, una de las virtudes del producto de la marca alemana, con una dirección suave y un muy buen radio de giro.
Mención aparte para el frenado: el e-Delivery dispone de tres niveles de frenado regenerativo que se pueden seleccionar desde una tecla ubicada en la consola. En el tercer nivel, el poder de retención es fuerte y hay que tenerlo en cuenta a la hora de pisar el pedal de freno: su funcionamiento es similar al de las versiones de combustión hasta la primera mitad del recorrido, pero si se pisa el pedal con más ímpetu, el poder de frenado puede llegar a sorprender.
La prueba consistió en dar un par de vueltas al circuito de entrenamiento de FADEEAC como para tener un primer contacto con el camión y sacar nuestras primeras conclusiones: si se impulsa una red de infraestructura o las empresas distribuidores o dueñas de flotas adquieren los cargadores para realizar el reabastecimiento durante la noche, el e-Delivery resulta una solución ideal para el uso urbano y con un costo operativo que promete ser la mitad o incluso más respecto a sus pares diésel, sin emisiones y con silencio casi absoluto.
Volkswagen sigue avanzando en su objetivo de comercializarlo en la región y de acuerdo a los voceros de la marca, si todo sale de acuerdo a lo previsto, sería lanzado en Argentina hacia finales de 2023.
